Se inició convocatoria para gestión del Instituto Nacional del Niño
De esta forma, se transferirá a una empresa o consorcio privado especializado la gestión de todas aquellos servicios no clínicos, permitiendo que el personal asistencial (médicos, enfermeras y técnicos) del Ministerio de Salud se concentre en la atención a los pacientes, en este caso, de niños entre 0 a 18 años.
Esto se hará a través de una Asociación Público Privada (APP) que se consolidará mediante un contrato de gerencia por 10 años, conocida como "Bata Gris", del cual existen muchas experiencias internacionales como México, Chile y España.
Al igual que en esos países, en Perú el servicio médico seguirá estando a cargo del Estado.
El operador privado que se adjudique la gestión del Instituto del Niño San Borja (INSN – San Borja), debe encargarse de proveer a dicho instituto los servicios de mantenimiento de toda la infraestructura del hospital, mantenimiento de todos los equipos de alta tecnología, ya adquiridos por el Estado.
Así como la operación de los servicios de alimentación, lavandería, limpieza, seguridad, gestión de residuos y laboratorio, entre otros.
Es decir, en lugar de contar con decenas de proveedores y decenas de contratos, se integrará en un solo proveedor especializado dicha responsabilidad, transfiriendo de esta manera todos los riesgos involucrados al sector privado, y exigiéndole el cumplimiento de diversos indicadores de resultados.
El objetivo es que la calidad de los activos y equipos que actualmente tiene el Instituto del Niño se mantengan a lo largo del tiempo, y permitir que el nivel de alta especialización y tecnología de esta entidad se mantenga con el transcurrir de los años con el fin de favorecer la atención de la población más necesitada.
El Instituto Nacional de Salud del Niño, ubicado en el distrito limeño de San Borja, es un moderno edificio de ocho pisos con más de 32,000 m2 de área construida, en los que se encuentran los más modernos equipos clínicos para operaciones quirúrgicas y diagnóstico de imágenes.
Entre ellos figuran neuronavegadores, equipo de circulación extracorpórea y hasta microscopio pentero para neurocirugías, los que constituyen la mayor tecnología médica disponible en el país.
Fuente: Andina
